El juicio a Cristina Kirchner


Quisiera hacer unas reflexiones en torno al juicio por corrupción contra Cristina Fernández de Kirchner, la Vicepresidenta de la Nación Argentina, que se está llevando a cabo en este momento.

Fundamentalmente, hay que explicar de qué se la acusa, en qué consiste la causa, cuáles fueron las repercusiones, qué ha pedido el fiscal, y qué conclusiones podemos sacar al respecto.

Para empezar, hagámonos la siguiente pregunta:

¿De qué se la acusa a Cristina Kirchner?

Se la acusa básicamente de administración fraudulenta, y de haber encabezado una asociación ilícita junto a su difunto marido Néstor Kirchner, para estafar al Estado Argentino y llenarse los bolsillos durante sus gobiernos; entre 2003-2015.

El fiscal Diego Luciani aseguró que esto se trató de la mayor maniobra de corrupción de la historia, significando para el Estado un perjuicio por más de 1.000.000.000 de dólares (sí, mil millones), y con el fin de favorecer a los Kirchner, sus testaferros y amigos.

En la acusación, se asegura que días antes de haber asumido la presidencia, el matrimonio presidencial creó una empresa constructora llamada Austral Construcción, a la que luego le fueron adjudicadas la mayoría de las obras que se desarrollaron en la Provincia de Santa Cruz, que como ustedes saben, fue gobernada por Néstor durante muchos años.

A quien pusieron al frente de esta constructora fue a un testaferro llamado Lázaro Báez, un ex gerente del Banco de Santa Cruz y monotributista, que rápidamente se convirtió en uno de los hombres más ricos del país. Esta persona no tenía ninguna experiencia en el rubro Construcciones; y sin embargo, pasó a encabezar esta empresa para enriquecer a quienes estaban detrás de él; o sea, al matrimonio presidencial.

Asimismo, Austral Construcciones recibió licitaciones para construir 51 obras en Santa Cruz durante los gobiernos de los Kirchner. Estamos hablando del 79% de las obras de dicha provincia.

Lo que hay que entender es que solo 27 de esas 51 obras fueron culminadas; y 24 se retrasaron. O sea que solo 3 de las 27 se completaron a tiempo. En cambio, la otra mitad de las obras nunca se terminaron. Aún así, todas se cobraron. Y no a precios regulares, sino con sobreprecios. Allí es donde aparece el factor de la corrupción. En todas las obras analizadas, las pruebas indican sobreprecios que van del 18% al 102%. En 2007 y 2011 (años electorales), las irregularidades aumentaban, ya que había que financiar con corrupción las campañas políticas. Austral Construcciones dejó de operar en el año 2015; justo en el momento en que Cristina Kirchner dejó el poder.

¿Cuál fue la defensa que hizo la Vicepresidenta unos días después?

A través de las redes sociales, Cristina se defendió haciendo un triste stand up. Fue una cuestión tristemente intrascendente. Había muchas expectativas puestas, en donde mucha gente pensaba que quizás sacaba un as de la manga, al ser una de las políticas más astutas de la República Argentina.

Pero por el contrario, lo que se escuchó fue un manotazo de ahogado sin ningún sustento, una serie de frases trilladas para el buen consumo del idiota militante K.

Por ejemplo, Cristina dijo:

"Estoy ante un pelotón de fusilamiento mediático-judicial".

La Vicepresidenta se equivoca. En realidad, ella está siendo enjuiciada por ser presuntamente corrupta.

Acá no hay ningún fusilamiento mediático-judicial. Es la Justicia la que está tratando de actuar en un país en donde los políticos corruptos siempre se han salido con la suya, mientras que los medios de comunicación están cubriendo el asunto. Algunos lo hacen a favor de CFK (como Página 12). Y otros, en contra (como el Grupo Clarín). ¿Pero pelotón de fusilamiento mediático-judicial? Insisto en que eso es un DISPARATE, el cual va dirigido al fanático kirchnerista promedio. Nada más que eso.

Posteriormente, CFK agregó que la persiguen por ser la representante de los pobres, y que eso no se lo perdonan.

Sí. Ella piensa que la causa se la armaron por este motivo.

Pero si hay alguien en Argentina que está FORRADO en dinero, es Cristina Fernández de Kirchner.


Solo un par de zapatos o una de esas carteras que compra compulsivamente en el extranjero no llega a valer menos de lo que significa el ingreso anual de los pobres en Argentina. Entonces, ¿quién puede creerse que ella sea la representante de los pobres?

A continuación, especificó un poco más:

"No vienen por mí. Vienen por los salarios, los derechos de los trabajadores y de los jubilados".

¿De qué salarios está hablando esta señora?

En el próximo gráfico, notarán que actualmente, el salario promedio se encuentra tan bajo como en Febrero de 2002, luego de la salida de la convertibilidad. No solo eso. En 2017, el único año rescatable de la gestión de Mauricio Macri, el salario PROMEDIO (no el mínimo) era de aproximadamente 1.745 dólares. En cambio, hoy está en 420 dólares.


Por las dudas, aclaro que yo soy liberal. No tengo ninguna simpatía por el Macrismo. En lo económico, me pareció un gobierno malo. Pero estos son números objetivos.

Con respecto a las jubilaciones de las que habla Cristina Kirchner, hay que remarcar que la Vicepresidenta cobra una jubilación de 4.100.000 de pesos mensuales por parte de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES). Esto equivale a 110 jubilaciones mínimas. O sea que para juntar todo el dinero que recibe Cristina mensualmente, se necesitan 110 jubilados que cobren 37.525 pesos cada uno. 

A diferencia de lo que dice, Cristina Kirchner es precisamente una de las máximas responsables de que los jubilados sean esquilmadas sistemáticamente.

También dijo que la acusación era un ataque contra la democracia; ignorando que es exactamente lo opuesto. No puede haber democracia con corrupción, que es un síntoma de la oligarquía. A su vez, la oligarquía es el gobierno de los pocos; y eso existe cuando son unos pocos quienes se enriquecen estafando al resto de los ciudadanos. Así que para restablecer la democracia en una república moderna, se necesita terminar con la corrupción.

Seguidamente, dijo algo que ya presta a la gracia; porque según ella, el fiscal pide 12 años de condena porque los mejores años que vivió Argentina en las últimas décadas, fueron los 12 años en los que gobernó el Kirchnerismo; como si se tratara de una cuestión simbólica. 

Vaya uno a saber quién le sugirió decir esto...

Ahora bien, lo que CFK no explicó en su alegato por Youtube es cómo hizo para comprarse 26 propiedades, 4 hoteles, aumentar su patrimonio un 4.000%, regalarle a su hija 5.000.000 de dólares, y cómo hizo Lázaro Báez para pasar de ser monotributista empleado de un banco a volverse uno de los hombres más millonarios de Argentina.

Nada de esto pudo aclarar. Ni siquiera intentó hacerlo. Y eso es lo que importa.

Es imposible que el salario de alguien que ha vivido como funcionario público a lo largo de toda su vida alcance para hacer semejante cantidad de compras.

Y como en Argentina no sobran estúpidos, aparecieron muchas voces a su favor. Aún viendo la planilla de los sobreprecios y todos estos hechos, a Cristina se la tiene que defender sí o sí.

Por ejemplo, la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires lanzó una declaración titulada:

"Declaración del Consejo Directivo sobre la PERSECUCIÓN JUDICIAL Y MEDIÁTICA por razones políticas contra Cristina Fernández de Kirchner".

No. Acá no hay ninguna persecución. Lo que hay es un juicio, que no es por razones políticas sino por corrupción.

Les reitero que casi el 80% de las obras realizadas en toda una provincia durante 12 años a un amigo del gobierno (y con sobreprecios) no es por un asunto político. En su defecto, es porque con los INSTRUMENTOS POLÍTICOS del Estado Argentino, ese matrimonio acumuló una enorme riqueza a costa del pueblo.

Entre estos defensores, apareció Juan Grabois, que en su cuenta de Twitter, publicó lo siguiente:


Más allá de la contradicción política y moral que implica militar en estos espacios políticos a pesar de las pruebas de corrupción, Grabois quiere ver a todos militando en favor de Cristina.

Además, agregó este tweet:


Ok, si vamos a hablar de una Argentina justa, entonces mencionemos el caso que yo estoy tratando en esta nota.

Incluso la funcionaria Luana Volnovich dijo que la sociedad no va a permitir que a Cristina la condenen. Una terrible locura; porque es en verdad LA JUSTICIA la que debe encargarse de que no la condenen (si no fuese culpable, claro está).

Otra frase que hemos escuchado fue la típica amenaza del militonto kirchnerista promedio. Esta vez, dicha por el actor Pablo Echarri:


Avísenle a este enfermito que los políticos son servidores públicos; NO semidioses...

Por cierto, resulta curioso que hasta los propios funcionarios K adviertan que se va a armar quilombo si la tocan a Cristina, mientras nombran como Viceministro de Economía a un denunciante sistemático de la Vicepresidenta. LA AMENAZA MENOS CREÍBLE.

Y desde Estados Unidos (por supuesto), Carlos Alberto "Indio" Solari salió a responderle a Cristina por Instagram:


Más que una locura legal, lo que está pasando es que hay un caso de corrupción que involucra a la Vicepresidenta argentina.

Seguramente, el "Indio" enviará estos mensajes desde la comodidad newyorkina, tal como hacen los "nac & pop". El "Indio" podrá ser un buen músico; y tiene todo el derecho de abandonar Argentina con el dinero que ahorró gracias a su música. Pero que no venga después a hablarnos del campo popular, a decirnos cuán nacionales debemos ser, etc.

Todas estas voces, que en realidad son más, quieren sugerir repetitivamente la idea de que Cristina genera el bienestar de los pobres, y que tenemos que ignorar la corrupción porque la única forma de vivir bien es siendo gobernados por ella.

De todas maneras, y al igual que con el ejemplo del salario promedio, en este enlace explico la situación económica actual del país, que poco y nada tiene que ver con los planteos que se hacen en defensa de Cristina:


El Kirchnerismo no representa a las clases bajas, sino a los vivos que quieren vivir de planes sociales y de la militancia política.

Por otra parte, hay mucha gente que cree que finalmente va a haber justicia. Desde ya que este es un pedido totalmente genuino y legítimo. Pero en mi opinión, eso no va a pasar. Lo máximo de justicia que se puede conseguir es que Cristina Kirchner tenga que dormir tomando Rivotril a escondidas. No veo mucho más.

La razón se debe a que si esta mujer es condenada, es muy probable que Alberto Fernández (el actual Presidente argentino) la indulte. Y aún no indultándola, ella tiene todavía instancias para recurrir. O sea que puede seguir escalando en el procedimiento judicial hasta la Corte Suprema de Justicia. Eso toma muchos años. Y hasta que todo este embrollo termine de resolverse, Cristina va a tener más de 70 años, se irá a vivir a su casa con los lujos a los que está acostumbrada, y no va a ocurrir nada más. 

Lamentablemente, no va a haber justicia. 

El sistema está armado justamente para beneficiar a los corruptos. Siempre funcionó así. 

Y pese a quien le pese, esta no va a hacer la excepción...

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